Mañana el mar
Serán tus ojos negros,
Temblor de labios, tus manos,
Y tus senos la almohada del deseo…
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Se trata de palabras. Ellas definen el universo. Nos contienen. Nos aturden. Nos acarician. Nos liberan. Nos atrapan. Por ellas, con ellas, peregrinamos por la vida...
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9 comentarios:
y sino hay mañana? :)
Lo que interesa es el poema, no las suposiciones, Sabrina.
El Mañana, dice Serrat, es solo un adverbio de tiempo". En el amor, el optimismo es el credo que genera cualquier realidad inexistente.
Pero, Orlando: Que mar, que ojos, que manos, que temblor, que senos, que almohada, que deseo!
La vida consiste, a veces, en atrapar esas ilusas prefiguraciones
y buscar vivirlas desesperadamente.
A veces y en ausencia de lo real, con apenas imaginarlas o capturarlas en un poema, puede que nos baste. Quien dijo que algo, no es al menos, mejor que la nada?
Mañana el mar será lo que sueño de ti hoy. El futuro es conceptto tan etereo que es preferible disfrutar lo que tenemos hoy, aunque sólo este en nuestros sueños, sean despiertos o dormidos.
Etendons l'amour-propre sur les autres êtres
C´est possible, anonime…
Merci, mes amis, par les commentaires.
Genial! Me encanta el título.
Saludos,
Joanne
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