Vienes. Te vas. Vuelves.
La vida es abrir y cerrar círculos.
La historia se hace caminando.
Y corriendo. Saltando.
Invocando sortilegios. Dioses de barro.
Retando demonios de humo y de sol.
Ven y vete. Las tuyas son anécdotas para el olvido.
Y estás aquí, pero no. Y si te vas,
será porque todavía no acabas de llegar.
Callejones sin salida, tu pasaje.
La luz es una vela frente al viento.
Y el amor, sexo barato, flor imposible.
El destino se construye sin un plan.
Habitando la sombra. El silencio.
Durmiendo con un ojo abierto.
Con un pie fuera de la cama.
Soñando arañas o serpientes.
O acunando una esperanza desesperada.
¿Te llamas Jacques, Jean, Pierre?
Te llamas Nadie. Te llamas máscara.
Y espejo.
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6 comentarios:
Me llamo espejo y estoy llena de humo.
Bellas tus letras.
Estas palabras tienen
cuerpo bajo la ropa
piernas, uñas, sudor,
vientre, mocos, colmillos,
manos que no acarician,
Dedos que no se tocan.
:)
guao..
Muy hermoso...
saludos
y
jaajja siiii y nos esta esperando noche hermosa!! junto a sabina!
yo voy el 22 y tu?
Me has dejado con algo suspendido que corre al ras por la cordillera de mis senos y desciende un poco, justo antes del ombligo, para acunarse sin que pueda -si quiera- darle un estúpido nombre.
Genial, Peregrino.
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