miércoles, agosto 02, 2006

Balance de las horas

De la luz apenas
tengo fragmentos
migajas de memoria
esquirlas de tiempo
versos disueltos en el aire

Y me sobran
soledades
esquinas de barrio
esperanzas que aún esperan

Me debe
tantas promesas
tantos amores invisibles
tanta ruina esta ciudad…

10 comentarios:

Floriella dijo...

A veces en esas promesas incumplidas se nos va mucho del aire que necesitamos para respirar...
¡Me encantó!

Indhira dijo...

La vid se nos va en ocasiones en esperas crueles e inútiles, tan crueles e inútiles como el tiempo mismo.

Heriberto dijo...

El necesario recuento de los haberes , de los daños; ...
aunque pensándolo bien no estoy muy seguro cuanto hay de necesidad y cuanto de masoquismo.
A veces creo que no saber duele menos.

Rosa Silverio dijo...

Me gustó mucho, Orlando. Así se escribe.

Qué bueno poder asociar tu nombre a una imagen. Un gusto verte.

Saluditos de fin de semana,

Ro

Ninoska Mermoud dijo...

La Gloria Trevi puede venir con su voz quebrada a gritar sus años idos, los daños en la memoria de la amante fatal.

Mr Bush, (Georgito para los hispanos), puede leer las escaramuzas que le escriben los asesores y presentar inventario falso de sus vagabunderías al mando de la casa blanca, siempre con su vocecita cínica y malévola.

Walter Mercado pondría los astros en perspectiva al mostrar la balanza como imagen premonitoria y aflautando su voz a fin de darle mayor peso a sus falacias.

Y puede venir un desconocido isleño, de nombre Peregrino, con gafas negras y media sonrisa desenfadada a testimoniar sobre los días y las horas, a desenpolvar "esquirlas de tiempo" y dejar constancia de lo que le debe esa ciudad tercermundista tan feliz y dolorosa, tan esperanzadora y cruel a la misma vez.
Al final, lo que sobra es tiempo, esperanzas, soledades. Quedan pendiente promesas, amores invisibles.

Moraleja:
Mientras otros callan, ciertos poetas y trovadores declaran sencillamente: hágase la luz, y luego entre "versos disueltos en el aire", así sucede.

1234567ycasillego dijo...

Hola, que tal peregrino :), si si, por fin ya el peregrino tiene rostro publico. y como siempre un gusto leer tus escritos.

sabri

Orlando Muñoz dijo...

Querida Aida Ivonne Moquete Pérez, alias Ivy, ¡no seas tan charlatana (perdón, quise decir preciosa)...!

Atodas y todos, gracias por su peregrinaje y los comentarios...

Orlando Muñoz

Ninoska Mermoud dijo...
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Orlando Muñoz dijo...

Está bien, Aida, no te vuelvo a decir Aida... perdón, quise decir Ivonne. Besos para ti.

Francisco Ortiz dijo...

En la sencillez se descubre a veces la falta, la agonía de pedir en voz baja. Un buen poema.